Hace años, el planteamiento del sistema era sencillo: acababas tu carrera y ¡ale! a colocarte en un buen puesto. No hacía falta más. Hoy en día está claro que no es así. Si realmente quieres conseguir ese merecido empleo más vale que comiences a plantearte algunas cuestiones, sobre todo cómo prepararte para destacar sobre el resto.
Es cierto que aprender requiere tiempo, esfuerzo y dinero, aspectos que, por desgracia, no sobran - más aún si tienes un trabajo y una familia -. Pero la formación es una inversión de futuro: cada día las empresas requieren personal más preparado y especializado para cubrir sus vacantes, así que, tarde o temprano, invertir en seguir aprendiendo te dará resultados.
Amplia tus conocimientos: estudia idiomas, informática, infórmate sobre las últimas tendencias en tu sector, mejora tus habilidades… el objetivo es que, día a día, seas mejor profesional y que no quedes obsoleto de aquí a un par de años.
Créeme, la preparación continua es valorada por las empresas: las compañías saben que el profesional que se forma continuamente es alguien preparado para el cambio y el aprendizaje constante. Conviértelo en tu carta de presentación.
Todos tenemos una cualidad que nos distingue, una habilidad que nos diferencia de los demás. Piensa un poco, ¿cuál puedes afirmar que es tu punto fuerte? Identifícalo y perfecciónalo. Pero ¡ojo!, no cometas el error de pensar que por ser experto en algo lo tienes todo hecho. No.
Evidentemente no puedes ser un experto en todo, pero la situación laboral actual requiere que conozcas de todo un poco si no quieres ver tus posibilidades de empleo reducidas. Esa es la fórmula: ser experto en un tema y tener conocimientos sobre temas afines. Y no olvides que adaptarte siempre será la clave del éxito.
Muestra al mundo de lo que eres capaz. Promociónate. Sé creativo. Innova. Responde con tu persona a una necesidad latente, dile a todo el mundo que tú eres lo que busca.
Trabaja tu reputación como profesional de tu sector. Actualmente dispones de grandes herramientas 2.0 para esta labor. Y no desestimes tus contactos en las redes, cualquiera podría resultarte clave para encontrar el empleo que buscas ¡Explota el Networking!
¡Suerte!